Imagen: Parque Nacional Cabo Pulmo.

17 diciembre 2011

APARTHEID CLIMÁTICO



Fuente: Periódico La Jornada. 17 de diciembre de 2011.
Los resultados de la conferencia mundial de cambio climático realizada a principios de diciembre en Durban, Sudáfrica, son una condena a la humanidad, especialmente a los países del Sur más afectados por el caos climático, mientras que los grandes contaminadores evadieron cualquier responsabilidad u obligación y aseguraron los mercados de carbono para seguir lucrando con falsas soluciones a la crisis. Como denunció la red internacional Justicia Climática Ahora, significó el establecimiento de un apartheid climático global para mantener los privilegios de una minoría a costa de todos los demás.

El problema nodal es la ausencia de medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que llevará a un aumento mínimo de 4 grados en la temperatura media global en tan sólo unas décadas. En el último siglo, el capitalismo industrial provocó un aumento de la temperatura promedio de 0.8 grados centígrados, que se traduce en desarreglos climáticos, como huracanes, sequías, inundaciones, menor rendimiento de cultivos, derretimiento de glaciares y de hielos permanentes que liberan grandes cantidades de metano, gas que tiene 20 veces peor efecto invernadero que el dióxido de carbono. Según los reportes científicos del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), para que el aumento de la temperatura no supere los 2 grados centígrados al 2100, es necesario reducir las emisiones de gases de 25 a 40 por ciento por debajo de los niveles de 1990. Un aumento de 2 grados tendría consecuencias devastadoras para muchos países, incluso podrían desaparecer estados insulares. Cuatro grados es más de lo imaginable y en algunas zonas, como las más secas de África, se traduciría en aumentos de 7-8 grados.
El protocolo de Kioto estableció metas de reducción obligatorias para los países industrializados con mayores emisiones (listados en su Anexo 1) de apenas 5 por ciento por debajo de los niveles de 1990. Aún así, Estados Unidos –que de todos modos no firmó el protocolo–, exigió que se pudieran usar mecanismos de mercado para la reducción de emisiones, con lo cual muchas supuestas reducciones son solamente transacciones virtuales. Los mercados de carbono no han servido para nada frente a la crisis climática, pero abrieron jugosos frentes especulativos con la venta de créditos de carbono. Con muy malas notas y sin efecto para bajar las emisiones, el Protocolo de Kioto finalizará su primer periodo de compromisos en 2012. Muchos gobiernos de países del Sur querían abrir un segundo periodo de compromisos, con metas mínimas acordes a las necesarias según el IPCC. Pero ya en la conferencia de cambio climático en Cancún en 2010, en lugar de compromisos obligatorios se aceptó declarar promesas, que si se cumplieran (improbable), no llegarían más que a reducciones de 13 a 17 por ciento.
Con un proceso antidemocrático e irregular como en Cancún, en Durban se aprobó de todos modos un segundo periodo del protocolo de Kyoto, pero como un cascarón vacío. Sin metas de reducción, sin compromisos vinculantes, sin mecanismos de control de reducciones del Anexo 1, pero cargando de obligaciones a los demás países que no están entre los contaminadores históricos. Estas medidas aplicarán a todos, aunque teóricamente se dirigen a los países de economías emergentes como China e India, que actualmente están entre los mayores emisores globales, aunque sólo en los últimos años –contra todo el siglo XX de los del Anexo 1– y que las emisiones per cápita de la India son 10 veces menores que las de Estados Unidos. Pese a este acuerdo leonino, que terminó con el principio deresponsabilidades comunes pero diferenciadas que existía en el convenio, igual se retiraron del Protocolo, Canadá, Japón, Australia, Nueva Zelanda y Rusia, sumándose a Estados Unidos.
La Unión Europea aprovechó la situación para negociar su firma para un segundo periodo de Kioto, imponiendo sus condiciones: sin metas obligatorias y abriendo un nuevo proceso de negociaciones que sustituya al Protocolo de Kioto en 2020. Este proceso y plazo, que querían todos los países del anexo 1, es para terminar de eliminar cualquier obligación de reducción, presionar a las economías emergentes y traspasar la responsabilidad de la crisis climática a las poblaciones de países pobres del sur, a través de mecanismos de mercado, que nuevamente, favorecen a las trasnacionales de los países industrializados. En lugar de cambiar de modelos de producción y consumo en esos países, se comercia con el espacio que no contaminan los países del Sur, a través de mecanismos altamente perversos como REDD en bosques. Se aseguró además la continuidad y nuevos mecanismos de mercado, se introdujo la discusión de usar agricultura y suelos como sumideros de carbono y se aceptaron tecnologías de alto riesgo, como la captura y almacenamiento de carbono en lechos marinos y formaciones geológicas, tecnología que promueve el uso de más petróleo, gas y carbón, legando el riesgo de escapes catastróficos a generaciones futuras.
Tanto el Fondo Verde para el Clima, como el nuevo Comité de Tecnología quedaron bajo la égida del Banco Mundial, que los usará para imponer más condiciones. Se establecióde facto carta blanca a la transferencia de tecnologías, sin cuestionar patentes ni aplicar el principio de precaución, lo cual resultará en dumping de tecnologías peligrosas, subsidiando a las trasnacionales.
Tanta irresponsabilidad ante las crisis y con las generaciones futuras contrastó con la riqueza de propuestas desde las organizaciones y movimientos sociales, que convocaron a la resistencia contra el nuevoapartheid global.

12 diciembre 2011

ALCANZA CUMBRE CLIMÁTICA RESULTADOS ALENTADORES, PERO POCO AMBICIOSOS

Fuente: Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA). 11 de diciembre de 2011.

  • Avanza acuerdo global pero sin compromiso vinculante de países como Estados Unidos.
  • Urgente que México trabaje en implementar acciones para cumplir compromisos internacionales para mitigar emisiones y disminuir la vulnerabilidad.
 
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), considera que la Cumbre de Cambio Climático que concluyó en Durban, Sudáfrica, alcanzó de manera inesperada resultados alentadores aunque poco ambiciosos para el régimen internacional en materia de cambio climático. Sobre todo, marca nuevas pautas para acelerar los procesos nacionales hacia la adopción de políticas tanto para la reducción de emisiones como para disminuir la vulnerabilidad ante los impactos del cambio climático.


 
Después de haber alargado por más de 24 horas el proceso de negociación, los Estados parte lograron llegar a un acuerdo en el marco de la 17ª Conferencia de Naciones Unidas sobre cambio climático, celebrada en Durban, Sudáfrica de la que se esperaban pocos resultados debido a la falta de claridad en el manejo del proceso y debido al empeño de varios países por bloquear temas esenciales como el financiamiento y la mitigación.

Los resultados fueron la aprobación del paquete de Durban que contiene: el establecimiento de un segundo periodo de compromisos del Protocolo de Kioto (que iniciaría en 2013), único instrumento jurídicamente vinculante; la aprobación del texto del grupo de trabajo de visión de largo plazo, en donde se incluyen diversas acciones y obligaciones que deberán cumplir países en desarrollo con economías en crecimiento como México; y la aprobación del planteamiento de lo que será el nuevo acuerdo jurídicamente vinculante que permitirá conjuntar la visión de los dos primeros instrumentos, a fin de consolidar uno que coadyuve a la estabilización de las emisiones en un nivel que impida el incremento de la temperatura por más de 2º centígrados, mismo que entraría en vigor hasta 2015.

 
Sandra Guzmán, coordinadora del Área de Desarrollo de Políticas Públicas de CEMDA, señaló que, a pesar de lo anterior, "se trata todavía de un paquete que no cumple con las características necesarias para combatir el problema climático de fondo". Ello debido a que el segundo periodo de compromisos del Protocolo de Kioto fue abandonado por Rusia, Canadá, y Japón, además de no haber sido nunca ratificado por Estados Unidos. Esto quiere decir que algunas de los principales emisores no están dentro del único instrumento vinculante. Además, -añadió Guzmán- "dentro del documento de visión de largo plazo, tampoco se establecen metas cuantificadas y obligatorias de reducción para dichos países, aunque establece ciertas líneas de acción para países como China, India, Brasil, Sudáfrica e incluso México, cuyo crecimiento está contribuyendo de manera significativa con el problema".

 
Por otro lado, la aprobación del Fondo Verde resulta de vital importancia para el diseño de la arquitectura financiera internacional para combatir el cambio climático. Sin embargo, el reto para 2012 es alcanzar los acuerdos necesarios para que no se constituya un fondo vacío como el que existe actualmente, sino que se tenga certeza sobre el origen de las fuentes que lo alimentarán, pues hasta el momento los países no han comprometido recursos para su capitalización, excepto el recurso que Alemania y Corea del Sur ofrecieron para comenzar con la operación del mismo.

 
Esto quiere decir, continuó Sandra Guzmán, que "aunque se haya aprobado el paquete, la tendencia de las emisiones por la falta de ambición en los acuerdos, aún nos mantiene en el escenario de incremento de 4º C en la temperatura, lo que nos obliga a presionar con fuerza para que las cosas pendientes puedan resolverse en la COP18 que se celebrará en Doha, Catar en 2012".


 
Por todo lo anterior, CEMDA considera que Durban fue un paso importante en el camino hacia el establecimiento de un régimen cada vez más ambicioso y jurídicamente vinculante; pero sigue siendo fundamental que estos acuerdos se traduzcan en acciones dentro de los países.

 
En el caso de México -quien fue presidente de la COP durante 2011 y ha mantenido un papel proactivo en el ámbito nacional-, debe mostrar al mundo que los compromisos con el tema son reales y que realizará acciones para hacer efectivos estos acuerdos. Las transformaciones necesarias son muchas, pero México tiene grandes oportunidades de acción tanto en el corto como en el mediano plazo, entre las de mayor relevancia para este periodo gubernamental se encuentran al menos 6 medidas que de cumplirse pueden marcar una buena tendencia de transición hacia el siguiente periodo de gobierno:

 
1.La aprobación y la publicación de una norma de eficiencia vehicular para vehículos ligeros;

2.La aprobación de la Ley General de Cambio Climático en la Cámara de Diputados.

3.La reducción paulatina de subsidios a los combustibles fósiles y el establecimiento de un esquema para que este recurso puede eventualmente dar apoyos a la transición energética;

4.La elaboración de un plan para el desarrollo bajo en carbono de México que permita dar permanencia a las acciones exitosas incluyendo los sectores energético y de transporte;

5.El establecimiento de un esquema para transparentar y mejorar el manejo de los recursos para la atención del cambio climático, tanto los asignados en el presupuesto (mismos que deben ampliarse) como los que provengan de la cooperación internacional.

6.El fortalecimiento de las instituciones para lograr un combate transversal e integral del problema.

 
México tiene grandes retos y de las acciones nacionales dependerá una contribución efectiva con el régimen internacional que se vio seriamente amenazado en Durban, pero que logró traer nuevamente esperanza hacia el final de los trabajos de negociación.

 
CEMDA hace un llamado a la Presidencia de la República y a todos los actores que tienen responsabilidad y obligaciones en la lucha contra el cambio climático -diputados, senadores, académicos, sector privado y sociedad civil- para que trabajemos de manera conjunta y responsable en alcanzar las metas de mitigación propuestas y los planes de adaptación que permitan reducir la vulnerabilidad del país y asegurar una mejor calidad de vida a las futuras generaciones. 

07 diciembre 2011

Senado aprobó nueva Ley de Cambio Climático

Ayer, 6 de diciembre, el Senado de la República aprobó la expedición de un nuevo ordenamiento llamado "Ley General de Cambio Climático". A continuación 2 notas al respecto:


Periódico Reforma


Luego de cinco años de discusiones, el Senado aprobó ayer con 76 votos a favor, 2 en contra y 5 abstenciones la Ley General de Cambio Climático.




Resultado de siete iniciativas de las fracciones del PRI, el PAN, el PRD, el PVEM y el PT, la nueva ley -que fue turnada a la Cámara de Diputados- establece una Comisión Intersecretarial y un Consejo de Cambio Climático. Cambia además el nombre del Instituto Nacional de Ecología (INE) por el de Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC).


Define como principios de la Política Nacional de Cambio Climático la sustentabilidad en el aprovechamiento de los ecosistemas; la corresponsabilidad entre el Estado y la sociedad en la protección del medio ambiente y la precaución cuando haya amenaza de daño grave o irreversible.


Plantea entre las acciones de adaptación frente al cambio climático la determinación de la vocación natural del suelo, el ordenamiento ecológico del territorio, la restauración de ecosistemas, la rehabilitación de playas y la protección de zonas inundables.


Las autoridades federales, estatales y municipales, indica, deberán elaborar atlas de riesgo que consideren la vulnerabilidad frente al cambio climático.


"La Política Nacional de Mitigación del Cambio Climático deberá incluir el diagnóstico, medición, monitoreo, reporte, verificación y evaluación de las emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero", indica el artículo 34.


"Esta política deberá establecer metas de reducción específicas y obligatorias", agrega.


La nueva normatividad plantea además la reducción gradual de los subsidios a los energéticos.


El panista Alberto Cárdenas, presidente de la Comisión Especial de Cambio Climático del Senado, señaló que con la aprobación se modifican entre 35 y 40 leyes federales para adecuar el marco normativo federal a las necesidades de adaptación y a la mitigación.


"Refuerza de manera importante las acciones para promover las energías limpias y renovables", sostuvo.


"Debemos y podemos planear y convertir nuestras ciudades para que sean más habitables, más seguras, más humanas y con menos emisiones de carbón".


El legislador destacó que las acciones para enfrentar el cambio climático plantean también una oportunidad de negocios.


"El cambio climático también hay que verlo como una oportunidad de desarrollo, verde, y sustentable para México", apuntó.


En tanto el senador petista Ricardo Monreal criticó que en el dictamen no se establezcan planes para la utilización racional de los recursos naturales con los que cuenta el país.


"El dictamen que estamos discutiendo no considera en su desarrollo de manera consistente, ni la creación de condiciones para el uso racional de los recursos naturales, ni el crecimiento económico del país, menos aún la generación de empleos ni reducción de la pobreza. Ni qué decir de la autosuficiencia alimentaria y la planeación demográfica", señaló.


La ley aprobada en el Senado establece una Comisión Intersecretarial de Cambio Climático integrada por:  Semarnat, Sagarpa, Ssa, SCT, SE, Sectur, Sedesol, Segob, Semar, Sener, SEP, SHCP, SRE.




Periódico La Jornada


El Senado aprobó ayer la Ley General de Cambio Climático, cuya finalidad es reducir la vulnerabilidad de los sistemas humanos y naturales del país, ante el reto que impone el calentamiento global. El nuevo ordenamiento jurídico regula las emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero.




Dispone que los tres órdenes de gobierno concurrirán para aplicar políticas de protección, preservación y restauración del equilibrio ecológico. Crea el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, instituye un fondo para el cambio climático y el Registro Nacional de Emisiones.


Determina sanciones de mil a 30 mil días de salario mínimo para las personas físicas o morales que no entreguen la información que se les solicite o por falsear datos, independientemente de cualquier responsabilidad civil o penal que se pudiera derivar, y en caso de reincidencia el monto de la multa podrá ser hasta el triple de lo originalmente impuesto.


Se aprobó en lo general con 76 votos en favor, dos en contra y cinco abstenciones, y se turnó a la Cámara de Diputados para continuar el trámite legislativo.


Los senadores destacan en las consideraciones de la ley referida que el Programa Especial de Cambio Climático 2009-2012 indica que México ocupa el lugar mundial 13 por sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). “La ubicación geográfica, la desigualdad social, la falta de infraestructura, entre otros factores, hacen al país vulnerable a los efectos del cambio climático.


En un escenario de incremento de la temperatura de dos grados centígrados se prevé que el territorio nacional experimente impactos de índole ambiental, social y económica estrechamente vinculados. Algunos de esos cambios son: “Alteración de los patrones de lluvia con incremento en la zona noroeste del país y del mar Caribe; incremento en el número e intensidad de ciclones tropicales y huracanes; reducción en la precipitación en las regiones hidrológicas de Baja California, noroeste, Pacífico norte, cuencas centrales del norte y valle de México; la actividad agrícola, particularmente la de temporal, puede experimentar una productividad decreciente e incluso pérdida de cosechas.


“Las actividades silvícolas enfrentarán la amenaza de los incendios forestales y aparición de plagas; las actividades pesqueras experimentarán reducción de las capturas debido a la migración de especies comerciales hacia zonas oceánicas más favorables; incremento de la morbilidad y mortalidad por olas de calor, enfermedades gástricas y respiratorias agudas y crónicas, particularmente en los grupos de población más vulnerables.


El incremento en el número de personas en condiciones de pobreza, especialmente alimentaria y de capacidades como consecuencia de la disminución de la producción de alimentos y por el desplazamiento de poblaciones hacia zonas no afectadas por desastres naturales asociados al cambio climático.


Durante la discusión en el pleno, se hicieron 16 reservas: nueve del coordinador de los senadores del PT, Ricardo Monreal; cuatro del perredista Tomás Torres, y tres del panista Alberto Cárdenas Jiménez. Las únicas aceptadas para su discusión fueron las del PAN y se aprobaron cambios a los artículos 29, 34 y 35 del dictamen, para que en la formulación de la política respectiva se tome en cuenta el compromiso para lograr la sustentabilidad del desarrollo económico, sin vulnerar la competitividad frente al mercado internacional.


En tribuna, el senador Monreal dijo que “los peores enemigos del deterioro ambiental son el desempleo, la pobreza y la falta de conocimiento, pues los hábitos de consumo promueven y provocan más de 53 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero, pero cuestionó que en el dictamen a discusión no se tomó en cuenta el desarrollo sustentable, la creación de condiciones para el uso racional de los recursos naturales, el crecimiento económico y generación de empleos, reducción de la pobreza, autosuficiencia alimentaria y la planeación democrática.


Cárdenas Jiménez expuso que México es uno de los cinco países más vulnerables al cambio climático por su biodiversidad, posición geográfica, pobreza, así como por los asentamientos humanos en zonas de riesgo.