Entre los integrantes de la Iniciativa están Adrián Fernández-Bremauntz, ex residente del Instituto Nacional de Ecología y asesor ambiental de la UAM; Omar Vidal y Vanessa Pérez-Cirera, de WWF-México; Vicente Estrada-Cajigal, presidente de la Asociación Nacional de Energía Solar; Manuel Gómez-Peña, director de sustentabilidad de Walmart; Gabriel Quadri, director de Sistemas Integrales de Gestión Ambiental; Odón de Buen, Pablo Gottfried y Gerardo Pandal.
En México menos del 5 % de la electricidad es provista por fuentes renovables de energía, a pesar de que la capacidad instalada ha aumentado significativamente en los últimos años, pasando de 2 megawatts en 2005 a 519 megawatts en 2010.
Este crecimiento es importante, pero no es suficiente si se considera que, según proyecciones del Imere, el país requiere aumentar 3.3% su generación anual de energía, entre el presente 2012 y el año 2050.
Las energías renovables son aquellas cuya fuente se encuentra en fenómenos de la naturaleza, procesos o materiales capaces de ser transformados en energía, y que se regeneran naturalmente, por lo que se encuentran disponibles de manera continua. Las tecnologías de energías renovables son eólica, geotérmica, hidráulica, solar, bioenergía y mareomotriz.
“México podría aprovechar el enorme potencial de sus recursos naturales para convertirse en un líder mundial y proveedor de insumos en materia de energía renovable. La consolidación de un mercado de renovables a gran escala ofrece importantes oportunidades de negocios para desarrollar tecnología propia, capacitación adecuada y crear empleos más sustentables”, afirmó durante la presentación de la iniciativa Vicente Estrada-Cajigal, presidente de la Asociación Nacional de Energía Solar.
Desde el punto de vista de Manuel Gómez Peña, director de Sustentabilidad de Walmart para México y Centroamérica, la sociedad mexicana no puede esperar pasivamente a que el Estado haga todo y debe participar activamente en el desarrollo de proyectos.
“La energía renovable contribuye a la competitividad de las empresas y a que tengamos mayor certeza sobre el costo de uno de los principales insumos de la industria: la electricidad. Claramente hay oportunidades de negocio para emprendedores con visión de largo plazo. Tan sólo en proyectos eólicos se podrían invertir en México más de 20 mil millones de dólares en los próximos 10 años, lo que generaría empleos en el país y desarrollaría a la industria nacional de alta tecnología”, señaló Gómez Peña.
Durante la presentación de la Imere, sus integrantes plantearon una agenda con cinco propuestas para la próxima los candidatos a la presidencia de la república:
1. Establecer metas ambiciosas pero alcanzables para las energías renovables al 2050 y aumentar el porcentaje de generación de electricidad a partir de fuentes renovables.
2. Facilitar el acceso de la energía renovable generada a la red de transmisión y distribución.
3. Establecer un sistema de precios e incentivos que refleje los beneficios ambientales y de seguridad energética que aportan las energías renovables.
4. Disminuir significativamente los subsidios a combustibles fósiles y reorientar el gasto público a la exploración y desarrollo de las energías renovables.
5. Considerar, dentro de la política nacional de impulso a las energías renovables, que un porcentaje determinado de sus componentes y/o sub-componentes sean de generación nacional.
“Confiamos en que todos los candidatos a la Presidencia recogerán nuestras 5 propuestas para que el desarrollo de esta mercado no sea una casualidad sino un ejercicio planeado y que optimice los beneficios económicos y sociales que puede tener para los mexicanos,” concluyó Adrián Fernández-Bremauntz.
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